El Carnaval de Dunkerque es una de las celebraciones más emblemáticas de Francia. Entre los meses de enero y marzo, la ciudad costera de Dunkerque se transforma en un espectáculo vibrante lleno de música, colores y alegría.
Este carnaval, que atrae a más de 50,000 visitantes cada año, tiene una historia que se remonta al siglo XVII, cuando los marineros se preparaban para zarpar en largos viajes de pesca hacia Terranova e Islandia. Hoy en día, esta antigua tradición ha evolucionado hasta convertirse en una de las fiestas más largas y emocionantes de Francia.
Historia y Origen del Carnaval
Los orígenes del Carnaval de Dunkerque se remontan a los inicios del siglo XVII. En aquella época, la celebración servía como despedida para los marineros que partían a pescar bacalao durante meses a los lejanos bancos de Terranova e Islandia. Los armadores ofrecían un banquete y pagaban la mitad del salario a los pescadores antes de su partida. Esta tradición, conocida inicialmente como «La Foye», se realizaba entre el lunes de Carnaval y el inicio de la Cuaresma. Con el tiempo, estas celebraciones fueron creciendo en importancia y se fusionaron con otros festejos que se llevaban a cabo en el mes de junio, llamados “Les Folies”, donde los desfiles y los disfraces también formaban parte esencial del evento.
En la actualidad, el Carnaval de Dunkerque se ha expandido y se celebra no solo en la ciudad, sino también en varias comunas vecinas, como Bergues, Bierne y Coudekerque-Branche, entre muchas otras. Este carnaval no solo es uno de los más extensos de Francia, sino que también es uno de los más estrictamente organizados en cuanto a su protocolo y reglas de participación.
Desarrollo del Carnaval
Durante más de dos meses, los «carnavaleros» desfilan por las calles con sus mejores disfraces, siguiendo a bandas de música que tocan melodías tradicionales. Las celebraciones principales se dividen entre los desfiles conocidos como «bandes» y los bailes populares, conocidos como «bals». Los desfiles se realizan los domingos por la tarde, donde una orquesta de 60 músicos, vestidos de pescadores, lidera la procesión bajo la dirección del tambor mayor, quien lleva un traje de soldado del Imperio.
Uno de los momentos más esperados del Carnaval de Dunkerque es el lanzamiento de arenques, una tradición peculiar en la que el alcalde de la ciudad lanza cerca de 450 kilos de arenques ahumados desde el balcón del Ayuntamiento. Los asistentes se agolpan en la plaza principal para intentar atrapar estos arenques, lo que genera una escena única y divertida.
La Semana de Mardi Gras
El punto culminante del Carnaval es la semana de Mardi Gras, donde se celebran los desfiles más grandes y coloridos. En estos días, miles de carnavaleros se unen para disfrutar de la música, los disfraces y el ambiente festivo. Además de los desfiles, se celebran una serie de eventos especiales como el rigodón final, una danza en la que los carnavaleros se agrupan al final de la jornada alrededor de un podio donde la orquesta toca las últimas melodías del día.
Otro elemento distintivo del carnaval son los «gigantes», muñecos de mimbre gigantescos que son confeccionados por la asociación local «Les Amis du Reuze de Dunkerque». Estos gigantes desfilan junto a las bandas musicales, y son una parte fundamental de la herencia cultural y folclórica de la región.
El Calendario de Celebraciones
Las festividades del Carnaval de Dunkerque comienzan a mediados de enero y se extienden hasta principios de marzo. Cada una de las comunas participantes organiza sus propios eventos en fechas diferentes, lo que permite que los carnavaleros disfruten de varios desfiles y bailes a lo largo de estos meses. Entre las comunas más destacadas están Bierne, Bergues, Malo-les-Bains y Gravelines, que atraen tanto a lugareños como a visitantes curiosos de otras partes de Francia y del extranjero.
Para aquellos que planean asistir al Carnaval de Dunkerque, es esencial conocer algunas de las reglas no escritas del evento. Por ejemplo, disfrazarse es obligatorio, y se espera que todos los participantes respeten los códigos del desfile, como seguir el ritmo de las bandas o participar en las «chapelles», pequeñas fiestas donde los carnavaleros pueden descansar, comer y cantar, pero solo si conocen el código de acceso.
Participar en el Carnaval: Una Experiencia Única
Si bien cualquiera puede participar en el Carnaval de Dunkerque, es recomendable tener en cuenta que, debido a la gran afluencia de personas, es crucial seguir las normas de seguridad y convivencia. Las celebraciones en las comunas vecinas suelen ser menos multitudinarias y más relajadas, lo que puede ser una opción ideal para quienes buscan una experiencia más tranquila sin perder la esencia del carnaval.
En definitiva, el Carnaval de Dunkerque 2025 promete ser una experiencia inolvidable, llena de música, diversión y tradiciones centenarias. Ya sea que decidas unirte a uno de los desfiles, participar en los bailes nocturnos o simplemente disfrutar del ambiente festivo en las calles, este carnaval es una de las mejores formas de sumergirse en la cultura del norte de Francia.
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